En el post anterior hemos empezado hablando de lo que es el sistema inmunitario, de qué está constituido y qué son los mecanismos inespecíficos del mismo
En este segundo post me gustaría hablaros un poco sobre mecanismos específicos de protección y una vez tengamos todo esto entendido en el próximo hablaremos de trucos o consejos para mejorar nuestro sistema inmunitario.
Los mecanismos específicos de protección.
Estos mecanismos se activan tras el reconocimiento de agentes concretos. Como indica su nombre su principal característica es la especificidad (es concreto para un determinado agente infeccioso).
Como ya hemos visto anteriormente, se denomina antígeno (Ag) a cualquier sustancia que es reconocida como extraña por nuestro organismo y que provoca una respuesta inmunitaria, estimulando la producción de anticuerpos.
La inmunidad específica se pone en marcha cuando el agente extraño ha conseguido vencer las barreras de la unidad innata. Las células dentríticas (un tipo de glóbulos blancos) en su papel de vigilantes de todas las posibles vías de entrada de patógenos al organismo endocitan (meten dentro de ellas) al microorganismo, y lo procesa en sus compartimentos endosómicos. Esta fase termina
cuando la célula presentadora de antígeno (en este caso la célula dentrítica) expresa en su membrana al antígeno procesado unido a moléculas del complejo mayor de histocompatibilidad (es como el DNI de la célula para avisar a las demás que es del propio organismo).
Estas células presentan el antígeno a los linfocitos T (existen B y T) pero no vamos a entrar en detalles) y estos ¨aprenden¨ a reconocer dicho antígeno para poder eliminarlo luego.
En otras palabras más fáciles: Las células dentrítcas ¨secuestran¨ al microorganismo, lo procesan y presentan trozos de él en la membrana para posteriormente enseñárselos a los linfocitos T para que sepan que dicho antígeno es ajeno al cuerpo y que se lo tienen que cargar.
Ahora estos linfocitos T (existen varios tipos pero tampoco vamos a entrar en detalle), conducen a la proliferación de los linfocitos B para que estos se diferencien y conviertan en células plasmáticas productoras de inmunoglobulinas (anticuerpos). Por lo tanto, para que haya una producción de anticuerpos es necesaria la activación previa de los linfocitos T.
Una vez iniciada la producción de anticuerpos específicos en el centro germinal de los órganos linfoides secundarios (por ejemplo en un ganglio linfático), van a ocurrir dos mecanismos esenciales para la efectividad de la respuesta:
- El cambio de clase, que permite la disponibilidad del isotipo necesario de anticuerpos.
- La maduración de la afinidad, una especie de ¨selección natural¨de los anticuerpos que reconocen con mayor afinidad el antígeno. Dado que la afinidad va madurando con El Progreso de la infección, su medida va a ser útil para determinar si se trata de una infección reciente o antigua (de ahí los llamados tests de anticuerpos).
Los anticuerpos se unirán a porciones concretas del microorganismo y sus actividades puedes ser:
- Neutralizadores de patógenos y toxinas.
- Opsonización (envolver) y facilitación de la fagocitosis del patógeno.
- Activación del complemento (un tercer tipo de inmunidad algo complejo que no trataremos por ahora).
- Citotoxicidad celular dependiente de anticuerpos (facilitar la eliminación de células infectadas).
Esto es un breve resumen de la batalla que se produce en nuestro cuerpo cuando entra en él un agente extraño o infeccioso.
Espero que os esten gustando estos posts a cerca de la maravillosa maquina que somos y si os interesa podemos seguir publicando más temas parecidos.
En este segundo post me gustaría hablaros un poco sobre mecanismos específicos de protección y una vez tengamos todo esto entendido en el próximo hablaremos de trucos o consejos para mejorar nuestro sistema inmunitario.
Los mecanismos específicos de protección.
Estos mecanismos se activan tras el reconocimiento de agentes concretos. Como indica su nombre su principal característica es la especificidad (es concreto para un determinado agente infeccioso).
Como ya hemos visto anteriormente, se denomina antígeno (Ag) a cualquier sustancia que es reconocida como extraña por nuestro organismo y que provoca una respuesta inmunitaria, estimulando la producción de anticuerpos.
La inmunidad específica se pone en marcha cuando el agente extraño ha conseguido vencer las barreras de la unidad innata. Las células dentríticas (un tipo de glóbulos blancos) en su papel de vigilantes de todas las posibles vías de entrada de patógenos al organismo endocitan (meten dentro de ellas) al microorganismo, y lo procesa en sus compartimentos endosómicos. Esta fase termina
cuando la célula presentadora de antígeno (en este caso la célula dentrítica) expresa en su membrana al antígeno procesado unido a moléculas del complejo mayor de histocompatibilidad (es como el DNI de la célula para avisar a las demás que es del propio organismo).
Estas células presentan el antígeno a los linfocitos T (existen B y T) pero no vamos a entrar en detalles) y estos ¨aprenden¨ a reconocer dicho antígeno para poder eliminarlo luego.
En otras palabras más fáciles: Las células dentrítcas ¨secuestran¨ al microorganismo, lo procesan y presentan trozos de él en la membrana para posteriormente enseñárselos a los linfocitos T para que sepan que dicho antígeno es ajeno al cuerpo y que se lo tienen que cargar.Ahora estos linfocitos T (existen varios tipos pero tampoco vamos a entrar en detalle), conducen a la proliferación de los linfocitos B para que estos se diferencien y conviertan en células plasmáticas productoras de inmunoglobulinas (anticuerpos). Por lo tanto, para que haya una producción de anticuerpos es necesaria la activación previa de los linfocitos T.
Una vez iniciada la producción de anticuerpos específicos en el centro germinal de los órganos linfoides secundarios (por ejemplo en un ganglio linfático), van a ocurrir dos mecanismos esenciales para la efectividad de la respuesta:
- El cambio de clase, que permite la disponibilidad del isotipo necesario de anticuerpos.
- La maduración de la afinidad, una especie de ¨selección natural¨de los anticuerpos que reconocen con mayor afinidad el antígeno. Dado que la afinidad va madurando con El Progreso de la infección, su medida va a ser útil para determinar si se trata de una infección reciente o antigua (de ahí los llamados tests de anticuerpos).Los anticuerpos se unirán a porciones concretas del microorganismo y sus actividades puedes ser:
- Neutralizadores de patógenos y toxinas.
- Opsonización (envolver) y facilitación de la fagocitosis del patógeno.
- Activación del complemento (un tercer tipo de inmunidad algo complejo que no trataremos por ahora).
- Citotoxicidad celular dependiente de anticuerpos (facilitar la eliminación de células infectadas).
Esto es un breve resumen de la batalla que se produce en nuestro cuerpo cuando entra en él un agente extraño o infeccioso.
Espero que os esten gustando estos posts a cerca de la maravillosa maquina que somos y si os interesa podemos seguir publicando más temas parecidos.
Karam Ramadan
Técnico en farmacia y parafarmacia.
Técnico superior en Laboratorio de Diagnóstico Clínico y Biomédico.
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